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El intendente del municipio bonaerense de Avellaneda, Jorge Ferraresi, aseguró hoy que se «asiste con traslado a quienes requieran controles, remedios y alimentos» a los habitantes de Villa Azul, asentamiento que ayer se decidió aislar tras detectar contagios de coronavirus.

El jefe comunal dijo a radio Provincia que se trabaja en «organizar el abastecimiento del lugar» y agregó que «hay algunos trabajadores esenciales dentro del barrio a quienes debemos garantizar que su empleador les mantenga el trabajo.

«Villa Azul tiene 3.000 familias, mil en Avellaneda -de las cuales 750 son viviendas urbanizadas- y 2 mil en Quilmes, pero las condiciones de vida también generan que el virus se propague más rápido porque hubo 50 contagios en la zona no urbanizada y cuatro sólo en la urbanizada”.

En ese sentido, Ferreresi evaluó que «esta situación sirve para que algunos se enteren de que hay argentinos que no tienen agua ni cloacas y un hábitat desesperante».

«Los que cuestionan el aislamiento es porque desconocen lo que es el barrio, donde su gente, con mucha conciencia, valora que el Estado la cuide», afirmó el intendente en otra entrevista con radio La Red.

El jefe comunal del Frente de Todos añadió que «esta es una oportunidad para poner el Estado en su lugar y que el resto de los argentinos entienda que se necesita un Estado muy eficaz y de una dimensión importante”.

Respecto del trabajo conjunto con el municipio de Quilmes, Ferraresi indicó que se «trabaja codo a codo con la intendenta Mayra Mendoza, con mucha ayuda de Nación y provincia».