El debate, que se extendió durante cuatro horas, reunió por teleconferencia a periodistas como Etchecopar, Diego Pietrafesa y Angela Lerena, del Sindicato de Prensa de Buenos Aires; Ana Mandakovic, de Faptren, Edgardo Sepúlveda, secretario general del sindicato de prensa de Rosario; y el investigador Esteban Zunino.
Así, junto a sus protagonistas, el cuerpo parlamentario debatió la actividad periodística y su incidencia en la vida democrática de la sociedad, motorizado por las solicitadas que se dieron a conocer en las últimas semanas.
En ese contexto, el diputado porteño Eduardo Valdés, remarcó que en las últimas reuniones expusieron los representantes de gremios y empresarios, pero no lo hizo «el sector más poderoso del periodismo» que «tiene una mirada de la actividad muy diferente a la de los periodistas y trabajadores que expresaron a través de una solicitada diversa y federal que la libertad de expresión es un derecho colectivo, de toda la sociedad».
«No podemos, en aras de la libertad de expresión, buscar rating. Es necesario investigar algo muy duro, que afecta directamente a la actividad periodística, y también los derechos de la sociedad: el espionaje ilegal, sufrido por periodistas que en muchos casos no piensan como yo, como Hugo Alconada y Carlos Pagni, como los 400 acreditados al G20. No podemos naturalizarlo».
En tanto, el diputado radical Álvaro de Lamadrid, expresó su «preocupación» y dijo que «escucha razonamientos que son justificatorios» y dejó claro que desde Juntos por el Cambio «siempre» expresaron «solidaridad con todos los ataques a los periodistas».
«No vemos la misma solidaridad desde el Frente de Todos, donde parece que hubiera periodistas buenos y otros periodistas malos que se merecen los ataque”, completó.
Al inicio de la reunión, Wolff volvió a quejarse por la decisión de la Presidencia de la Cámara de no convalidar que hayan invitado a la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, quien concurrirá en agosto a las comisiones vinculadas a ese área.
Lerena leyó el comunicado de mas 2.000 periodistas donde niegan que haya riesgo a la libertad de prensa, consideró que «no todo vale» en la profesión.
“Cincuenta periodistas fueron agredidos durante los últimos cuatro años; 4.500 puestos se perdieron, cerraron empresas y se pagaron salarios en cuotas” y mencionó la situación de los 354 «despidos ilegales» en Télam y los 65 en el diario Clarín.
Por su parte, la sindicalista de Faptren Ana Mandakovic señalo que «la libertad no está en juego» y dijo que «banalizarla es muy grave en un país donde hemos tenido desaparecidos».
En tanto, Etchecopar dijo que «no entiendo otro tipo de periodismo que no sea el franco. Yo no estoy casado con Macri ni con Cristina”.
La diputada oficialista Carolina Moises dijo que «el límite es la agresión, la misoginia, la discriminación» de comunicadores sociales y las «estigmatizaciones de género».