El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, aseguró hoy que «no importa si es muy rígido el aislamiento en el Gran Buenos Aires» porque «hay que permitir actividades siempre y cuando no pongan en riesgo la vida; fuera de eso no aceptaremos ninguna presión que genere falsas expectativas y que no es lo que piensa la mayoría».
«En el Gran Buenos Aires la situación es distinta que en el interior de la provincia y el que no lo entienda y quiera presionar con abrir todo pone en riesgo a los demás», dijo Kicillof en una conferencia prensa.
Además el gobernador bonaerense sostuvo que el transporte público «sólo está permitido para trabajadores esenciales con la debida documentación», debido a que es «el principal propagador del virus», durante una conferencia de prensa.
También expresó la necesidad de «impedir el desabastecimiento de productos y el aumento de precios» y que en los comercios «no nos podemos dar el lujo de la normalidad» y que se abrirán «los de cercanía» y que los centros comerciales continuarán cerrados.
«El mensaje sigue siendo: quedate en casa», sintetizó el gobernador.