La Comisión de Acción Social y Salud Pública de la Cámara de Diputados emitió hoy dictamen de consenso sobre el proyecto que impulsa la creación de una Campaña Nacional para la Donación de Plasma Sanguíneo de pacientes recuperados de coronavirus de todo el país.
La iniciativa impulsada por el presidente del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner; de su par del PRO, Cristian Ritondo y del titular del Interbloque Federal, Eduardo Bucca, y que recoge iniciativas de otras bancadas, como la radical, será puesto a consideración del plenario de la Cámara en la sesión prevista para mañana.
El proyecto reunió una treintena de firmas de los representantes de los bloques mencionados, en tanto que el diputado de la Coalición Cívica que integra la comisión pidió abstenerse «por cuestiones de forma en el tratamiento» de la iniciativa.
En el inicio de la reunión, el presidente de la comisión, Pablo Yedlin (Frente de Todos), destacó que «el de la donación de plasma es un sistema que se viene tomando en muchos lugares del mundo, más allá de que aún no se sabe cuan efectivo es».
«Quiero destacar a la Dirección Nacional de Sangre del Ministerio de Salud.; y a todos los bloques porque hemos llegado a una propuesta con bastante acuerdo», remarcó el legislador por Tucumán, al tiempo que destacó que «la cabecera del proyecto sea la ´Campaña Nacional'».
«Lo que estamos haciendo acá es promocionar la donación de plasma porque se está intentando comprobar científicamente su utilidad para avanzar en ese tema y debe ser solidariamente», aseveró.
La vicepresidenta de la comisión, Carmen Polledo (PRO-Juntos por el Cambio), dijo que «la donación de plasma se trata de una función terapéutica» y que «se busca armar una norma para tener la mayor cantidad posible».
«En Argentina hay 13.000 personas recuperadas y sin embargo la cantidad de sangre donada es baja; por eso es bueno lo que propone el proyecto: Que se difunda ampliamente esto y que se extienda por dos años», agregó.
Para la diputada, «si hay una luz de esperanza en el tratamiento mediante el plasma, está bueno que trabajemos en esto».
Por el radicalismo, Josefina Mendoza, autora de la primera iniciativa en este sentido (presentada el 7 de mayo), señaló que «lo que se busca es la toma de conciencia sobre la relevancia sanitaria que tiene este tema».
«Que se invierta en la capacitación, y que no solamente lo conozcan los pacientes recuperados, sino que el Estado nacional invierta en esto, que claramente no es una vacuna, pero que ha demostrado tener la capacidad de salvar vidas», completó.
La única voz disonante sobre el proyecto la expresó la diputada de la Coalición Cívica Leonor Martínez Villalda, quien se preguntó «por qué hay tanto apuro en sacar la ley» y advirtió: «No quiero desilusionar, pero en Estados Unidos han hablado de la poca incidencia (del plasma en la recuperación de pacientes)».
El proyecto que mañana llegará al recinto promueve la creación de una campaña nacional para la promoción de la donación voluntaria de plasma sanguíneo, proveniente de pacientes recuperados de la Covid-19 de todo el país.
Establece además una licencia especial para los y las donantes bajo relación de dependencia de dos días por cada donación de plasma que realicen.
En el mismo sentido, se los reconoce como «ciudadanos/as solidarios/as destacados/as de la República Argentina».
El proyecto también procura garantizar el traslado de aquellos pacientes recuperados de Covid-19, aptos para ser donantes de plasma y que no tengan los medios para realizarlo.