El ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, afirmó que, a causa de la pandemia del coronavirus, la sociedad valora y «reconoce» ahora un Estado «fuerte y eficaz» que puede asegurar un «sistema de protección y cuidado» al ciudadano, y advirtió que, en adelante, «no será la lógica de la rentabilidad» la que defina el futuro de los pueblos.
En una entrevista con Télam, Katopodis reafirmó que, «a más tardar», a fin de mes terminarán las obras de construcción de 12 hospitales modulares, la mayoría en el Gran Buenos Aires, y el interior del país, para integrarse a la red nacional sanitaria que programa el gobierno nacional para afrontar el avance de los casos de Covid-19.
También, destacó el encuentro de días atrás entre el presidente Alberto Fernández, los dirigentes de cámara del sector y la Unión Obreros de la Construcción (Uocra), y dijo que allí «se acordó no poner en riesgo todo el esfuerzo realizado, y cuidar la salud y establecer provincia por provincia, localidad por localidad» una posible liberación de la obra privada.
Sobre la revalorización del Estado
En el marco de la entrevista, Katopodis evaluó que «hay un reconocimiento de la sociedad de que es el Estado el que deliberadamente puede reorganizar las condiciones de vida después de esta pandemia», y remarcó que «es un Estado fuerte y eficaz el que puede asegurar un sistema protección y de cuidado».
El ministro y ex intendente del partido bonaerense de San Martín enfatizó que, «en adelante, no va a ser el mercado ni va a ser la lógica de la rentabilidad ni el individualismo el que defina y reconstruya los lazos».
En esa línea, reafirmó que «no hay dudas de que hay una revalorización del Estado en tanto actor y en su capacidad de volver a ordenar y reorganizar la sociedad por un lado y, por otro lado, fundamentalmente en su capacidad de articular políticas de cuidado».
En cada decisión que hay que ir tomando se tiene una mirada integral y cruza varias áreas de un mismo gobierno”
Gabriel Katopodis
No obstante, el titular de la carera de Obras Públicas entendió que en esta «resignifcación del rol del Estado» la ciudadanía «no va estar dispuesta a cualquier tipo de Estado, sino que va reclamar un Estado presente, eficiente y con una mirada integral».
«Hay un cambio -reflexionó- que nos obliga a todos a trabajar con agendas transversales porque ninguna de las soluciones es estrictamente sanitarista, o fiscalista, o instrumental en algún tema, sino que en cada decisión que hay que ir tomando se tiene una mirada integral y cruza varias áreas de un mismo gobierno».
En ese plano, analizó que la «mirada más interesante es la del cuidado como derecho, como bien público», y sostuvo que, «al ser un bien público entra en el registro de los derechos y, entonces, el Estado lo tiene que hacer efectivo, con lo cual está supeditado a la situación social, o a si puedo o no puedo acceder, sino a una línea de base de derecho y dignidad que hay que garantizar».
Ejes de trabajo
Asimismo, Katopodis explicó a Télam que, entre sus ejes de trabajo, se encuentran «lo sanitario, con una agenda de 50 obras desparramadas en todo el país, con todos los colores políticos, oposición y oficialismo».
«En total -describió- vamos a sumar unas 420 camas de terapia intensiva y unas 1.000 de intermedia y una 800 de internación general», detalló el ministro.
Entre esos trabajos se cuentan los 12 hospitales modulares que se están construyendo en un plazo 20 días para afrontar la atención de la pandemia, ubicados en General Rodríguez, Florencio Varela, Quilmes, Tres de Febrero, Hurlingham, Moreno, Almirante Brown, Lomas de Zamora y Mar del Plata, en la provincia de Buenos Aires; y en Resistencia, Chaco; en el Gran Córdoba y Gran Rosario.
Por otro lado, indicó Katopodis «hay obras a terminar o a completar en términos de hospitales, terapias, centros de salud, todos con el objetivo de sumar camas», para cuando se empiecen a incrementar los casos de coronavirus y, por ende, las internaciones.
El proceso de las obras de los hospitales modulares
Acerca de los 12 hospitales modulares en construcción, señaló que la «contratación se realizó a través de las Naciones Unidas (ONU) y se logró por un lado una participación del sector privado abierta, alcanzando normas de integridad y transparencia».
«Toda la contratación fue en soporte electrónico, asegurando que los proveedores no se conozcan y, así, se evitó de esa manera la cartelización y no se aceptaron pagos de adelantos de obras y tampoco se efectuaron redeterminaciones y se acortaron procesos licitatorios», detalló.
El funcionario remarcó la «vasta experiencia » de las Naciones Unidas en «desarrollos de infraestructura en etapas de emergencia y catástrofes» y puntualizó que es un «modelo que se aplica también al programa Argentina Hace, con la idea de ir trasladarlo progresivamente, de ir fijando criterios para ir aplicándose a todas áreas del Ministerio».
«Lo más importante es que los oferentes entre sí están a ciegas y, además, la rapidez en desarrollar y adjudicar en 20 días, lo que nos permitirá finalizar la obra civil para el miércoles 30 de abril a más tardar y empezar luego el equipamiento, con 24 camas de terapia intensiva y 52 de intermedias, cada uno», precisó.
En este marco, al referirse a las excepciones al aislamiento social, preventivo y obligatorio por el coronavirus, Katopodis sostuvo que la reactivación de la obra «se va ir acordando con los gobernadores», con quienes, desde el Gobierno nacional, se dialogará «todo lo que tiene ver con la ampliación de los sectores con un criterio sanitarista».
«El protocolo establece que se tiene que ampliar la superficie al aire libre, garantizar el transporte de los trabajadores, que lo viene garantizando, y, en ese marco, se irán reactivando las obras si se aplican las normas de estricto protocolo sanitario», concluyó Katopodis.