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La Asociación de Bancos Argentinos (Adeba), que integran los bancos privados de capital nacional, respaldó este jueves el proceso de reestructuración de la deuda pública externa que lleva adelante el Gobierno nacional que, aseguró, «requiere el aporte y el esfuerzo conjunto de todas las partes involucradas».

El proceso, que está en una etapa de análisis y diálogo entre las partes, se basa en una propuesta realizada por el gobierno argentino para emitir nuevos bonos con una quita leve de capital pero con mayores recortes sobre los intereses y un plazo de gracia de 3 años.

«Adeba apoya las gestiones y esfuerzos que llevan adelante las autoridades con el objetivo de restaurar la sostenibilidad de la deuda pública y recuperar el crédito de la República», aseguró la entidad a través de un comunicado.

En ese sentido manifestó que «tan importante como lograr un acuerdo entre las partes, es que el mismo sea sustentable una vez alcanzado» y que «recuperar y mantener en el tiempo el crédito público, permitirá sentar las bases y generar las condiciones necesarias para que el país retome la senda de crecimiento inclusivo y de generación de empleo».

«La recuperación del crédito público permite el acceso del sector privado al mercado de capitales y así expandir las opciones de financiamiento de la inversión y consumo», aseguró la entidad que encabeza Javier Bolzico.

Esto debe ser una responsabilidad y objetivo del conjunto de la sociedad, que involucra a los distintos actores del sector público y del sector privado

Javier BOlzico

Este martes, la Asociación de Bancos Públicos y Privados de la República Argentina (Abappra) también expresó su apoyo al proceso de renegociación de la deuda que calificó como «un aporte para superar las dificultades actuales y fortalecer el ahorro y la inversión argentina como instrumento para el desarrollo nacional».

El pasado 16 de abril, el ministro de Economía, Martín Guzmán, anunció que la propuesta de reestructuración de deuda externa de la Argentina implicaría la emisión de nuevos bonos con una tasa de interés promedio de 2,33% y un período de gracia de tres años.

La propuesta incluye una reducción de capital de US$ 3.600 millones -que equivale a una quita del 5,4% sobre el stock total de deuda- y una reducción de pagos de intereses de US$ 37.900 millones, lo que equivale a una quita de 62%.