Lorena, la madre de Lucía Costa, la joven que falleció por las quemaduras sufridas tras una explosión en el bar Zar Burgers en la localidad bonaerense de San Miguel, afirmó que «todos son responsables» de la muerte de su hija, a quien «dejaron tirada y sin ayuda» cuando fue alcanzada por las llamas.
“Todos son responsables, a mi hija la dejaron tirada y nadie la ayudó, quedó prendiéndose fuego. Los chicos quisieron ayudarla y les dijeron que salgan del lugar”, dijo Lorena en declaraciones efectuadas durante la marcha realizada hoy en demanda de justicia y para reclamar el cambio de carátula en la causa.
«A mi hija no la tengo más, pero por lo menos los culpables tienen que estar todos presos», aseguró.
«Vamos a empezar a luchar por chicos que también fueron víctimas» de lo que sucedió el viernes pasado, añadió en alusión a los jóvenes que sufrieron heridas de diversa gravedad en el hecho que le causó la muerte a Lucía.
La mujer también se expresó a favor de que se «cambie la carátula» del expediente judicial y que «paguen todos los que tengan que pagar, porque no puede ser que esto quede impune».
Con respecto a los responsables del local, Lorena afirmó que “nadie se comunicó» con ella y dijo que “esto no tiene que pasar acá ni en ningún lado”.
“Hasta los testigos que no se prendieron fuego no pueden dormir porque tienen la imagen de Lucía quemándose, están muy mal, están quebrados”, señaló.
Lorena expresó que Lucía le da «fuerza para seguir acá y pedir justicia”, y destacó que ella “siempre ayudaba” a los demás.
“Acá estamos haciendo justicia por Lucía, vinimos desde la catedral rezando con los chicos con los que ella misionaba, todos cantando”, afirmó, y agregó tras finalizar la marcha que “fue muy lindo”.
En el bar, amigos y vecinos con remeras estampadas con la foto de Lucía dejaron en las ventanas de Zar Burgers fotos de la joven, flores, velas y carteles con reclamos de justicia.
Maximiliano, el tío de Lucía, dijo a Télam que “todos los responsables que determine la justicia deben ir presos”, y destacó que la fiscal que tiene a su cargo el caso “se mostró comprometida con la causa”.
Frente a Zar Burgers, que se encuentra clausurado, afirmó que la marcha transcurrió de manera pacífica con la presencia de “vecinos, amigos y compañeros de Lucía”.
“Los amigos de Lucía están muy tristes”, remarcó en medio de los aplausos en homenaje a la joven.
Ayer, el abogado de la familia, Manuel Aramayo, dijo que «a simple vista no se trata de un homicidio culposo», por lo que la familia de Lucía pedirá «el cambio de carátula».
Por el hecho, se encuentran imputados el dueño del lugar, el encargado y una mesera por lesiones culposas y homicidio culposo.
El hecho tuvo lugar el pasado viernes 9 de octubre en Zar Burgers, ubicado en la calle Paunero 1189, de San Miguel, donde se produjo una explosión al tomar contacto un líquido inflamable que acercó una camarera con un hornito con el que se pretendía calefaccionar el bar.
Lucía murió producto de las quemaduras y ocho de sus amigos resultaron con heridas de diferente consideración.